Hace mucho tiempo en una galaxia muy muy lejana… La serie Star Wars relata las vivencias de la familia Skywalker cuyos integrantes son capaces de percibir y utilizar “La Fuerza”, lo cual les permite desarrollar habilidades como la telequinesis, la clarividencia y el control mental, entre otras. R2-D2 es uno de los robots más famosos del mundo y uno de los personajes más peculiares de la serie. Lo hemos visto en 10 de las 11 películas de Star Wars. R2-D2 significa Second Generation Robotic Droid Series-2, según una enciclopedia de Star Wars publicada después del estreno de la película. La función de este robot es técnica, ya que puede reparar cualquier parte de la nave, asistir como navegante y también brindar información valiosa sobre muchos datos de probabilidades en las misiones.
En 2024 estamos viendo que los robots empiezan a ser protagonistas en muchos tipos de industrias. Hace poco leí un artículo publicado por el portal computerhoy.com el cual me inspiró a inscribir esta columna. Recientemente se anunció que unos robots humanoides acaban de firmar un contrato para trabajar en las fábricas de BMW. Este ha sido el primer contrato con robots humanoides en la historia. El artículo menciona que “el robot de propósito general Figure 01 mide 170 cm de altura, y tiene una capacidad de carga útil de unos 20 kilos, pesa 60 kilos y alcanza una autonomía de hasta 5 horas. Camina a una velocidad de 1,2 m/s. Su característica distintiva es que no funciona mediante órdenes programadas. Tiene «un chatGPT» en su cabeza, y gracias a la inteligencia artificial es capaz de aprender tareas, simplemente viendo vídeos explicativos”. El artículo también menciona que el robot puede aprender solo otras actividades.
En cosmética, la robótica también empieza a marcar tendencia. El año pasado el magazín Cosmetics and Toiletries publicó una nota al respecto, en la que menciona que la IA y los robots ayudan a desarrollar patentes y productos de belleza. Dentro de las actividades en las cuales se pueden programar, está la preparación de muestras para análisis de eficacia de productos en la fibra capilar y también robots que lavan, acondicionan y secan el cabello para probar formulaciones. Una aplicación de la IA se relaciona con la optimización de los diseños experimentales para el desarrollo de tonos de maquillaje. La publicación también menciona algo muy interesante: “los robots no reemplazan puestos de trabajo, sino que su función es condensar cantidades masivas de datos para crear coherencia en las muestras y las pruebas”.
Cobots = robots colaborativos. Los cobots están en auge en medicina y cosmética. El portal universal-robots.com indica que: “A medida que se reducen los ciclos de vida de los productos médicos y cosméticos, la automatización colaborativa aporta agilidad a la fabricación. Los brazos robóticos pueden utilizarse para maximizar la producción y garantizar una calidad uniforme, y luego pueden reutilizarse rápidamente para nuevas líneas de productos. Los cobots se utilizan en toda la industria para manipular máquinas y cintas transportadoras, ensamblar con precisión dispositivos y productos, y empaquetar artículos en blísteres, cajas de cartón o palés. Los cobots le ayudan a reducir el riesgo de contaminación humana en procesos delicados y entornos limpios ya que pueden utilizarse para la manipulación y el montaje de productos estériles y dispositivos o implantes médicos. Los cobots también pueden liberar a los trabajadores de tareas de manipulación de materiales en operaciones que pueden ser riesgosas porque generan mucho polvo, ruido y alta vibración, permitiéndoles pasar a tareas de mayor valor”.
Los nuevos R2-D2 al servicio de la cosmética en 2024 están integrados con inteligencia artificial para optimizar los servicios de belleza. En algunas ciudades vemos por ejemplo brazos robóticos especializados en colocar pestañas y en aplicar esmaltes logrando hacer novedosos diseños en la tendencia nail-art. Al respecto el portal luxurylashacademy.com indica que: “si bien los robots de inteligencia artificial están avanzando en la industria de la belleza, los temores de ser reemplazados por máquinas se alivian al comprender que estas tecnologías están diseñadas para complementar, no reemplazar, las habilidades y el arte de los artistas de las pestañas. La industria de la belleza prospera gracias a la creatividad humana, y el toque personal que los artistas de pestañas aportan a su trabajo es algo que las máquinas no pueden replicar”.
En Star Wars vimos que la Federación de Comercio fue un conglomerado de transporte y comercio interestelar durante los últimos años de la República Galáctica, tan poderoso que tuvo sus propios representantes en el Senado Galáctico. En 2024 estamos viendo los aportes a la cosmética de la International Federation of Robotics (IFR) ifr.org/association. En la página de internet es mencionado que: “the International Federation of Robotics connects the world of robotics around the globe”, además dentro de sus objetivos menciona: “to promote the positive benefits of robots for productivity, competitiveness, economic growth and quality of work and life” y “to promote research, development, use and international co-operation in the entire field of robotics” entre otros. Con seguridad, pronto empezaremos a ver asociaciones entre la industria, la académica cosmética y esta clase de organizaciones para generar innovaciones nunca antes vistas en pro de la belleza.
En febrero de 2024 vimos una noticia sorprendente, conocimos a un robot bípedo con tejido muscular que puede caminar, detenerse y girar. Un equipo de investigadores japoneses creó un robot biohíbrido, hecho principalmente de caucho de silicona y tiras de tejido muscular esquelético cultivado en laboratorio, que imita la marcha humana y funciona en el agua. Los robots biohíbridos serán protagonistas en un futuro cercano en cosmética al participar como “voluntarios” en las pruebas de eficacia cosmética. Gracias a su composición biohíbrida, los robots para pruebas cosméticas tendrán una composición dérmica y muscular similar a los humanos, de forma que las empresas podrán testear varios productos en el mismo individuo, llevando a cabo estudios de eficacia de activos para skincare y pre-selección de fórmulas antes de iniciar las pruebas finales en humanos. Los robots biomiméticos también son un concepto interesante porque estos imitan la forma y el movimiento de los seres vivos. Estos robots podrían ser más eficientes y adaptables a entornos complejos. Los robots se utilizarán para realizar pruebas de irritación, alergia y eficacia de productos cosméticos de forma rápida y eficiente. Esto reducirá la necesidad de pruebas en animales y contribuirá a una industria cosmética más ética.
El diagnóstico de la piel es otro capítulo interesante en esta tendencia. Este año veremos como los robots con IA podrán diagnosticar problemas de la piel y recomendar productos personalizados para su tratamiento.
- Aplicación de cosméticos: Robots podrán aplicar cosméticos de forma precisa y uniforme, incluso en áreas difíciles de alcanzar.
- Experiencia de compra: Los robots se utilizarán en las tiendas de cosméticos para ayudar a los clientes a encontrar los productos adecuados y ofrecer consejos personalizados.
- Mega-personalización: Los robots podrán analizar el tipo de piel, tono, necesidades específicas y preferencias del cliente a través de sensores, escáneres e IA. Con esta información, podrán crear productos cosméticos personalizados con ingredientes y cantidades exactas para cada persona. Esto permitirá una mayor eficacia de los productos y una mejor experiencia para el cliente.
- Boom de realidad aumentada: Los robots podrán mostrar a los clientes cómo se verían con diferentes productos cosméticos de varias categorías antes de comprarlos. Esto les ayudará a tomar decisiones de compra más informadas y seguras.
Los robots podrían utilizarse para desarrollar nuevos ingredientes cosméticos con propiedades específicas. En el área de calidad, los robots pueden utilizarse para realizar un control de calidad más preciso y eficiente de los productos cosméticos. Por otro lado, los robots podrían utilizarse para crear campañas de marketing y publicidad más personalizadas y efectivas.
Este es el camino… la robótica tiene el potencial de revolucionar la industria cosmética en 2024. Con seguridad, la Princesa Leia se sorprendería al ver como los robots pueden ofrecer a los clientes diagnósticos precisos, productos personalizados, nuevas formas de aplicación, experiencias de compra más personalizadas y una producción más sostenible. La cosmética robótica es uno de los grandes drivers de innovación en nuestra industria para este año.
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