La población brasileña está muy ligada a las cuestiones de belleza, vanidad y cuidados del cuerpo: teñir y tratar el cabello, cuidarse la piel, frecuentar salones de manicura o pintarse las uñas casi semanalmente son, por ejemplo, prácticas muy comunes entre las mujeres. Hasta los hábitos de higiene son diferentes. Según estudios realizados los brasileños se duchan una media de tres veces al día.
En los últimos 15 años el sector de HPPC (Higiene Personal, Perfumería y Cosméticos) presentó un crecimiento constante en Brasil y como consecuencia el país ocupa hoy el 3er lugar en el ranking mundial de consumo de cosméticos, por detrás de EEUU y Japón. Las previsiones apuntan que Brasil sobrepasará a Japón en 2020, convirtiéndose en el segundo mayor mercado de HPPC del mundo.
Según el estudio “Más femenino – La belleza de la mujer Brasileña”, publicado por Exame.com en julio de 2012 y realizado por “Data Popular”, actualmente 5 de cada 10 brasileñas compran y se fidelizan más con las marcas de lo que lo hacían en el pasado. Para el 35,5% de ellas el sector es indiferente y el 12,7% da una importancia menor a las marcas.
De acuerdo con el mismo estudio, aunque las compras no sean realizas sólo por las consumidoras, son ellas las que determinan gran parte del destino del dinero de ese sector. En la compra de productos masculinos por ejemplo, ellas se corresponden con un 93,2% del total de los compradores. A la hora de tomar decisiones la prioridad es la calidad: el 63,7% de las brasileñas se preocupan más del producto que del precio, el 18,5% buscan calidad, el 14,3% priorizan el precio en relación con la calidad y el 3,5% prácticamente no se fija en el precio.
Entre las consumidoras que adquieren productos de belleza con cierta frecuencia, 7 de cada 10 compran al menos dos veces al mes, representando un índice del 37,1%. Tras ellas, se encuentran las que compran al menos una vez al mes, con un 26,9% y, las que compran de 3 a 5 veces al mes se corresponden con el 23,7% del total. Las que consumen en más de 5 ocasiones durante un mes son el 9,2%, y el 3,1% restante corresponde a las que no compran mensualmente.
La fidelidad también es una característica fundamental del consumo para las brasileñas. Perfume y desodorante (60,6%), limpieza facial (52,3%), tinte para el cabello (51,7%) y protector solar (50,3%) son los productos más comprados teniendo en cuenta la marca.
Consumo de la nueva clase C en Brasil
La nueva clase C, también conocida como la nueva clase media, representa una gran parcela en ascenso de la población brasileira. La belleza ocupa un espacio importante en la autoestima de las mujeres de esa clase, que viven un momento de valorización de su apariencia natural.
La clase C es exigente en relación a los productos que consume y tiene consciencia de que no puede errar en la compra, ya que no posee una segunda oportunidad de adquisición. Estos consumidores buscan la multifuncionalidad en los productos, comprando los que son conocimos como “X en 1”, y esa versatilidad se traduce en una alternativa para mantener el patrón de belleza sin dañar el bolsillo.
Según los datos de Target Group Index, de IBOPE Media, el interés de las empresas en la producción de productos “X en 1” se debe al crecimiento en la última década del 17% del consumo de cosméticos por mujeres pertenecientes a la clase C.
Consumo y mercado de lujo
Según el Cuaderno “Fórum de inspiraciones 2014”, de Assintecal, se observa que en el contexto de la crisis mundial los conglomerados de lujo están invirtiendo menos en Europa y Norteamérica y se están redirigiendo a otros objetivos como por ejemplo Brasil.
Por primera vez, el mercado de lujo del país está en plena expansión, apoyándose principalmente en el crecimiento del poder adquisitivo, en el aumento de la población con más de 60 años y en la educación de los brasileños para el consumo de marcas.
De todos modos, para obtener el éxito en ese segmento es necesario comprender que el consumidor brasileño es diferente del de los mercados más maduros. Mientras que en EEUU y Europa ese público está más interesado en valores ligados a la herencia, cuestiones históricas o de arte, el brasileño busca más brillo y prestigio.
Fuente: III Cuaderno de Tendencias 2014-2015 da ABIHPEC