El sector de los cosméticos se ha convertido en uno de los sectores más dinámicos hoy en día. Dicha industria demanda innovación continua e inversiones constantes en el desarrollo de nuevos productos y procesos capaces de llegar a una gran diversidad de consumidores que se muestran ávidos de novedades. Debido a esto, la búsqueda de nuevas materias primas y tecnologías para el desarrollo de formulaciones cosméticas cada vez más eficaces y compatibles con los diferentes tipos de piel y de productos ha sido una constante por parte de los investigadores y formuladores de la industria cosmética.
Gran parte de las materias primas usadas en los productos cosméticos se obtiene a partir de la modificación de substancias de origen natural, principalmente vegetales, con la finalidad de obtener productos con más de una función, más seguros y más eficaces. Esas nuevas materias primas son las llamadas multifuncionales, ya que poseen propiedades diferenciadas para reforzar a los conceptos preestablecidos de los productos, tales como la mejora de la hidratación, mejora de la penetración en la piel, propiedades de humectación, resistencia al agua o efecto sensorial modificado entre otras. Una de las maneras de obtener materias primas multifuncionales es mediante el uso de la nanotecnología con la encapsulación de activos cosméticos.
La nanotecnología es una ciencia bastante utilizada a nivel mundial en la fabricación de materias primas innovadoras en diversas áreas de aplicación industrial. En el área cosmética, las partículas que encapsulan activos destacan por su forma diferenciada de penetración y actuación en la piel y en el cabello. Son partículas muy pequeñas, en la escala del nanómetro (un nanómetro equivale a una billonésima parte del metro) y, cuando se emplean en el fabricación de cosméticos, son capaces de promover nuevos beneficios y reducir efectos indeseados.
Las ventajas del uso de la nanotecnología para la fabricación de materias primas son innumerables, lo que hace de ella toda una promesa para la aplicación cosmética. Es posible modular y fabricar activos nuevos mediante la tecnología nano. También es posible utilizar solamente materias primas biocompatibles y biodegradables en la fabricación de nuevas materias primas, haciendo que no se produzca ningún tipo de problema relativo a la alergenicidad o a la acumulación en el organismo. Más allá de estas ventajas, destaca la estabilidad frente a la luz, al aire y a otros componentes de las formulaciones de los activos encapsulados, el aumento de la hidratación cutánea a través del efecto oclusivo y la liberación lenta y gradual con aumento de la permeabilidad.
En Brasil, su interés aplicado a los cosméticos es reciente, se encuentra en crecimiento y cautiva cada vez a más investigadores de las principales universidades brasileñas. Ya existen incluso empresas nacionales que producen materias primas con tecnología nano. Para el mercado cosmético brasileño esto es una gran ventaja, ya que hoy en día los fabricantes pueden adquirir esas materias primas con tecnología innovadora en el mismo país, evitando problemas de importación, pago en moneda extranjera y largos plazos de entrega.
Los beneficios de esta tecnología están siendo percibidos también por los consumidores que reconocen dicha tecnología como innovadora y perciben su diferencial de eficacia. La transmisión al público de los beneficios de esta nueva tecnología, conjuntamente con las comprobaciones de eficacia y seguridad de los productos, demuestran que la nanotecnología ha venido para quedarse y que va a calar cada vez más en la innovación brasileña de la industria cosmética.
(*): En colaboración con Cândice Filipe – Maestro en Ciencias Farmacéuticas .
Lea más artículos sobre cosméticos y productos de higiene personal